lunes, 17 de agosto de 2015

Células Monocristalinas


Una célula fotoeléctrica, también llamada célula, fotocélula o celda fotovoltaica, es un dispositivo electrónico que permite transformar la energía luminosa (fotones) en energía eléctrica (electrones) mediante el efecto fotovoltaico.
Están fabricadas con silicio monocristalino que presenta efecto fotoeléctrico: absorben fotones de luz y emiten electrones. Cuando estos electrones libres son capturados, el resultado es una corriente eléctrica que puede ser utilizada como electricidad.
Estas células pseudocuadradas de silicio monocristalino de alta eficiencia están hechas de un solo cristal de silicio de muy alta pureza, para transformar la energía de la radiación solar en energía eléctrica de corriente continua.
Su comportamiento es excelente en toda la banda del espectro de la luz, con rendimientos especialmente elevados en situaciones con poca luz o nubosidad hasta situaciones con luz solar directa (radiación difusa).
Con los altos criterios de calidad empleados en su fabricación y en los tests de control, se consigue que las diferencias de rendimiento entre distintas células es inferior al 0,3%.
Nuestras células monocristalinas poseen un color negro intenso homogéneo en toda la superficie de la célula y, lo más importante: no hay desviaciones de color de unas células a otras.